El jefe de estado propuso reformas judiciales y afirmó ser un "un cultor del diálogo".
A través de este proyecto, buscan "superar la crisis que claramente afecta la credibilidad y el buen funcionamiento de la justicia federal con competencia penal".
El presidente Alberto Fernández propuso un plan de reforma judicial ayer miércoles (29/07) por la tarde, con el objetivo de expandir y reorganizar el sistema judicial federal en todo el país. El jefe de estado, acompañado de funcionarios, legisladores nacionales, académicos, jueces de paz y expertos legales, propuso las principales directrices para las reformas, incluida la reorganización de la Justicia Federal Penal y el establecimiento de un Consejo Consultivo de juristas.
El plan de reforma fusionará 12 tribunales penales federales con 11 casos penales económicos. En el nuevo plan federal de justicia penal en Buenos Aires, estos casos se duplicarán a 46 tribunales. El tribunal existente retendrá una de las dos secretarías que tiene hoy, y el resto se asignará a uno de los nuevos tribunales.
Por otra parte, el Presidente anunció el establecimiento del Consejo Consultivo para el Fortalecimiento del Poder Judicial y del Ministerio Público. El comité estará compuesto por 11 juristas de diferentes ámbitos del derecho. En palabras del Presidente, "repensar el funcionamiento de nuestro Poder Judicial y de nuestro Ministerio Público" y hacer recomendaciones.
En su discurso, Alberto Fernández enfatizó la importancia de la justicia ordenada para el funcionamiento normal de la democracia, criticó al gobierno anterior e instó a los sindicatos a construir el país.
Frases principales del discurso. Aquí están las mejores frases:
"Los cuatro años que precedieron mi asunción como Presidente, estuvieron signados por medidas que afectaron las reglas de imparcialidad que deben gobernar la acción".
"(En el macrismo) se fue perdiendo la transparencia judicial. El cuestionamiento a jueces que expresaran independencia se tornó tan cotidiano como la manipulación de otros jueces que respondieran a los intereses del poder de turno".
"Se abrieron camino pretendidas doctrinas (Irurzun) que fueron utilizadas para convertir al encarcelamiento preventivo en un sistema de penas anticipadas. De esa manera, el principio de inocencia y de defensa en juicio fueron repetidamente vulnerados".
"Sin Justicia independiente del poder político no hay república ni democracia. Solo existe una corporación de jueces dispuestos a satisfacer el deseo del poderoso y castigar sin razón a quienes lo enfrentan".
"De una vez por todas digamos nunca más a una Justicia que es utilizada para saldar discusiones políticas, y a una política que judicializa los disensos para eliminar al adversario de turno".
"Nadie puede sorprenderse por lo que estamos haciendo. Sometí mi parecer al veredicto popular y el pueblo con su voto me acompañó. Y reafirmé ese mismo compromiso ante el Parlamento argentino, en el mismo instante en que asumí la Presidencia de la Nación".
"Lo que estamos proponiendo hoy no es otra cosa que consolidar una Justicia independiente, regida por las mayores normas de transparencia y que desarrolle los procesos con celeridad y eficiencia".
"Proponemos organizar mejor la Justicia Federal y, en particular, superar la crisis que claramente afecta la credibilidad y el buen funcionamiento de la justicia federal con competencia penal".
"Buscamos superar que el poder decisorio se concentre en un reducido número de magistrados y magistradas que, como sucede en la actualidad, tienen el poder de conocer y decidir en casi la totalidad de las causas con relevancia institucional y consecuentemente mediática."
"Es fácil observar la manipulación de los tiempos del proceso que les permite a los jueces y juezas actuantes impulsarlos o detenerlos en función del clima político imperante. A eso el saber popular terminó calificándolo como justicia pendular".
"He recurrido a juristas de reconocimiento técnico indiscutido. Han sido sus sólidos antecedentes académicos y la experiencia enorme que individualmente acumulan, lo que me ha determinado a convocarlos y convocarlas a la tarea de repensar el funcionamiento de nuestro Poder Judicial y de nuestro Ministerio Público".
"Yo quisiera que las recomendaciones que finalmente me brinden, sean parte del debate que estamos abriendo y se conviertan en las piedras basales de un nuevo sistema judicial que nuestra sociedad está demandando desde hace ya mucho tiempo y que lamentablemente nuestra democracia no ha podido construir todavía".
"No he llegado hasta aquí para defraudar a los alumnos y alumnas que me oyeron en las aulas de la universidad pública reivindicar la importancia de preservar las reglas del debido proceso. Sé que esas reglas se olvidan cuando en los tribunales entran a tallar intereses económicos o políticos".
"Soy un cultor del diálogo. Valoro el don de saber escuchar y de reflexionar sobre lo que escucho. Creo que vivimos un tiempo único en el que una pandemia nos ha hermanado. Estoy seguro de que no es hora de imponer decisiones: es hora de que esas decisiones seamos capaces de construirlas en conjunto".
fuente BAE