Hoy hace 61 días que el tapabocas llegó para ser parte de la vida cotidiana y en comunidad en la provincia de Río Negro. Todo cambió. Pasamos de salir con documentos, billetera y celular; a llevar todo eso más el barbijo, el alcohol en gel, toallitas desinfectantes y todas las precauciones.
Fue el 13 de abril cuando la gobernadora Arabela Carreras, con la adhesión de la intendenta de Roca, Maria Emilia Soria, emitían las primeras resoluciones que establecían la obligatoriedad de su uso para circular.
Algunos hechos en casa, otros de uso exclusivamente profesional; la población mundial se precipita sobre estas “mascarillas” para hacer frente a la amenaza invisible del coronavirus.
Hoy, tras dos meses de puesta en práctica, el barbijo no solo representa un icono de la pandemia a escala mundial sino que también es uno de los símbolos de la solidaridad en nuestra región.
La fabricación social e ilimitada de cubrebocas fue un rasgo de los últimos meses, cuando la necesidad se acrecentaba. Miles fueron elaborados por los propios vecinos y donados a los hospitales o para familias, allí cuando la demanda superaba la oferta.
Pero si bien su eficiencia está comprobada científicamente, es preciso recordar que no es infalible, ya que hay varios factores que intervienen para que pueda ser eficaz.
El médico infectólogo Enrique Raimondo y la licenciada Yanina Basaul del Equipo de Control de Infecciones del hospital López Lima, dialogaron con LA COMUNA sobre este insumo médico que cobró popularidad en poco tiempo.
“El barbijo o tapabocas es útil, es una herramienta más que contribuye a disminuir los contagios, pero para mi la medida más eficaz sigue siendo el distanciamiento. Estar a más de dos metros de cualquier persona eso garantiza mucho más que el virus no llegue”, aseguró Raimondo.
Es que si dos personas están a menos de medio metro las chances de contagio aumentan, mas allá de que ambos tengan barbijo puesto. Además, explicó que también suben las chances si este se utiliza incorrectamente y si no es de adecuada calidad.
“No hay nada infalible, no hay nada que te proteja 100% en la medida que no se use el elemento en forma correcta”
Enrique Raimondo, médico infectólogo Roca
“Mucha gente usa los tapaboca debajo de la nariz y eso es una manera incorrecta de usarlo, ahí no hay una protección”, sentenció el infectólogo y agregó que otra forma en la cual el tapaboca no oficia de barrera es cuando está humedecido.
Además, el virus puede ingresar por las conjuntivas oculares, entonces “podes tener abiertas las vías respiratorias pero si no tenes lentes y antiparras también es un riesgo”, agregó.
Por su parte, Basaul aseguró que este elemento de protección viene a “frenar la diseminación ambiental” ya que el cubreboca contiene las gotas dentro las cuales se transporta el virus y no contagia a otra persona, si lo llega a estar portando de manera asintomática.
No obstante, el coronavirus no solo puede salir por boca, sino a través de las manos, por tocarse la nariz, la cara o reacomodarse el barbijo y así queda en las superficies que el resto toca.
Sobre la adaptación a este medida, los gobiernos aseguran que a esta altura es una de las medidas que mas se logró instaurar aunque todavía falta corregir “malos hábitos” o “usos incorrectos”.
Desde el Equipo de Control de Infecciones de Roca detectan un cierto relajo en el uso del barbijo.
“Hay personas que, como que no se entienden cuando hablan, se acercan una a otra y se bajan el barbijo o lo tienen sobre el mentón. El riesgo es que -justamente- no cuando no podemos mantener la distancia social es cuando con más razón tenemos que tener puesto el tapaboca para no generar esta contaminación cruzada”, expresó Basaul.
“Cuando se usan de manera comunitaria, los barbijos más que proteger a uno, protegen al resto”, fundamentó el infectólogo roquense.
Una de las deudas pendientes sigue siendo respetar el distanciamiento social, medida que la mayoría de los expertos considera que es la principal e indispensable para prevenir el contagio.
¿Cuanto tiempo más?
Mucho se ha hablado acerca de la extensión de esta medida, algunos hablando del 2020 completo, otros presagian más tiempo. Lo cierto es que nadie sabe con certezas. Entonces ¿debemos acostumbrarnos?.
“Eso va a depender de la evolución de la pandemia y de la situación en cada lugar y en cada ciudad”, opinó Raimondo, consultado sobre este punto. Basaul, por su parte, dijo que se estima que se seguirá usando en la medida que siga habiendo circulación comunitaria o que no se pueda mantener el distanciamiento social.
Haciendo una proyección, vamos a tener que aprender a vivir con el virus tomando ciertas medidas”
Yanina Basaul, integrante del Equipo de Control de Infecciones del López Lima
“Quizás el cubreboca no sea un elemento que a futuro se siga recomendando, pero si la distancia social y no compartir elementos de uso común”, concluyó la licenciada.
Sanciones
En Roca, la multa para quien no use tapaboca para circular en la vía pública llega a 30 USAM, lo que equivale a 1200 pesos. Pero además, hay otra multa específica para comercios, empresas e instituciones que permitan el ingreso de personas sin barbijo, ya sea de un rubro esencial o no. En estos casos la multa asciende a 500 USAM, 20.000 pesos. Con pago espontáneo está previsto el 50% de descuento.